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La Rinoplastia es un procedimiento diseñado para cambiar el aspecto de la nariz, ya sea para aumentar, disminuir o modificar su forma, para corregir la apariencia o algunos trastornos de obstrucción al respirar.
En algunos casos para tener una mayor armonía con el rostro se realiza un aumento de mentón (este procedimiento se realiza de acuerdo a lo hablado con el cirujano plástico correspondiente).
Dado que la nariz es la parte central de la cara, el profesional busca darle la mejor forma dependiendo las facciones del rostro, esto lo determina mediante la valoración que se le realiza al paciente, esta cirugía puede ser de dos tipos, cerrado y abierto, según corresponda.
La de tipo cerrada que además es la más usada, debido a que no deja cicatriz visible porque se accede por medio de las fosas nasales a la zona a tratar y se moldea la nariz de la forma deseada.
La de tipo abierto, donde el cirujano realiza el procedimiento por medio de la zona media de la nariz y así acceder a la zona a tratar.
El paciente debe usar tapones y/o yesos nasales de 2 a 6 días, según indicaciones médicas por parte del cirujano. Es importante que el paciente no se toque los vendajes ni se los retire antes de que el cirujano la examine, esto podría alterar los resultados del procedimiento.
Se recomienda retomar sus actividades cotidianas en un tiempo aproximado de 1 a 2 semanas después de que se realiza el procedimiento.
Resuelve tus dudas fácilmente.
Sabemos que tomar la decisión de realizarte una rinoplastia es importante. Aquí respondemos las preguntas más comunes para que te sientas seguro(a) y bien informado(a) antes de tu procedimiento con nuestros cirujanos plásticos.
Es una cirugía que cambia la forma de la nariz para mejorar su apariencia o función respiratoria.
Se puede usar anestesia general o local con sedación, según el caso y el paciente.
Generalmente, la cirugía dura entre 1 a 3 horas, dependiendo de la complejidad.
Los resultados finales se aprecian entre 6 y 12 meses después, cuando la inflamación ha bajado por completo.
Sí, la rinoplastia también puede corregir desviaciones del tabique u obstrucciones que dificultan la respiración.